Meditación en casa: Recomendaciones fáciles de aplicar

Las diferentes técnicas de meditación siguen su propio conjunto de instrucciones de meditación para ser efectivas y llevar a la persona a un nivel más alto de relajación y conciencia. Estas pautas están ahí para ayudar a proporcionar los pasos que una persona puede seguir cuando comienza una sesión de meditación. La duración puede diferir según las diferentes técnicas y puede implicar diferentes ejercicios para lograr ese mayor nivel de conciencia.

Cualquier práctica de meditación puede realizarse en diferentes momentos del día. Pero se sugiere que lo hagas por la mañana. La mañana es el momento ideal para hacer una sesión de meditación ya que es el momento del día con menos interrupciones. También es bueno encontrar un lugar en la casa que sea tranquilo y privado. Aquí hay un ejemplo de cómo puedes hacer tu meditación en tu propia casa.

Postura

En primer lugar, intenta sentarte erguido, manteniendo la columna vertebral relativamente recta. Puedes sentarte en una cama, en el suelo o en una silla, lo que te resulte más cómodo para sentarte. Puedes cruzar las piernas mientras te sientas, que es la posición habitual para la meditación. Pero si cruzar las piernas provoca molestias o la interrupción del flujo sanguíneo en las piernas, intente descruzarlas y extenderlas. También puedes tratar de cambiar a una posición sentada más cómoda. La meditación también puede depender de qué tan cómodo te sientas para ser efectiva.

Visualización

Después de encontrarte en una posición cómoda para sentarte, el siguiente paso es cerrar los ojos y relajarte. Haz esto por un breve momento para calmar su cuerpo y mente. El siguiente paso es tratar de visualizar un determinado objeto. La visualización es uno de los pasos importantes en la meditación

Concentración

Trata de concentrarte en el objeto en tu mente y trata de ser consciente de sus características. Centrarte y concentrarte en algo en tu mente puede llevar tiempo y mucha práctica. Esto es importante ya que la meditación depende de poner tu atención en un solo objeto en tu mente mientras minimizas las distracciones tanto como sea posible.

Interacción

Ahora que te has concentrado y has visualizado un objeto específico en tu mente, trata de sentirte como si fueras ese objeto. Trata de hacerte una idea de cómo está siendo ese objeto. Siente cómo es tener esa forma, ese color o esa textura. Conviértete en el objeto de tu mente. Al hacerlo, trata de sentirte tranquilo y relajado. No intentes obligar a tu mente a hacerlo. Solo sé consciente de ese objeto y deja que sin esfuerzo se convierta en ti. Esto también puede tomar algún tiempo para acostumbrarse. Pero la práctica te hará mejorar.

Lo importante en este ejercicio de meditación es que intentes visualizar un objeto determinado sin esfuerzo y sin forzar a tu mente a hacerlo. Lo que puede ser aún más difícil de hacer la primera vez que haces este ejercicio es cómo mantener su visualización. Puede haber momentos en que un pensamiento pasajero o una distracción ocurran en tu mente que te hagan perder el enfoque.

 

Resultado

Con la práctica de seguir estas sencillas instrucciones de meditación, es posible que puedas acostumbrarte a desarrollar tu enfoque y concentración y a mantener tu mente libre de distracciones. Para entonces, aprenderás a relajar no solo tu cuerpo sino también tu mente.